Ya empezó

Llego tarde, lo sé, pero es que la actualidad sobre otros temas no me ha dejado tiempo para cosas más frugales, así que acudo raudo y veloz, como no podía ser de otra forma, a comentar el primer Gran Premio de la temporada.
Todo parecía que debería ser éste un mal comienzo para nuestro querido Dani y el balance del primer asalto no se puede, ni mucho menos, considerarlo malo. Todo lo contrario, después de una salida que nos dejó a todos boquiabiertos y el corazón acelerado supo mantenerse un buen rato en cabeza y tener la calma suficiente de ver como muchos otros lo adelantaban para luego recuperar el terreno perdido. Lo mejor y lo peor según se mire es ver a Rossi haciendo la goma, primero ir hacia delante y luego ir hacia atrás. Y como siempre y como parece ser de forma irremediable aparecía el torpedo rojo australiano que parece desintegrarse a cada salida de curva pero que sin embargo mantiene su trayectoria firme a mayor velocidad que cualquier otro. En segunda posición el impertinente niño Lorenzo al cual deberíamos de felicitar por lo conseguido y por la forma de conseguirlo, si no fuera que al final de la carrera y dos días después todavía reclame, utilizando los medios, que Dani se arrodille ante él y le rinda pleitesía (algo que él nunca hizo antes). Este muchacho parece que no cambiará nunca. Podrá ganar todo lo que se le ponga por delante pero seguirá siendo un impertinente maleducado al que nadie se le ocurrirá enseñarle maneras de como comportarse.
La cosa promete y esperemos que Dani dé el espectáculo donde debe darlo, en los circuitos, en la carrera. Ya toca ¿verdad?
El próximo domingo toca Jerez, territorio vikingo, y ahí casi siempre hay espectáculo.