22 d’agost 2006

Espectáculo

Al fin se produjo lo que un día u otro debía de suceder. Por primera vez este año hemos visto un enfrentamiento directo entre Rossi y Dani. Dani salía desde la novena posición de la parrilla y uno a uno fue superando a los rivales hasta conectar con la trasera de la moto de Rossi. Antes tuvo que dejar atrás a su teórico jefe de equipo que como ya es habitual demostró su enfado, con algún que otro gesto de gusto dudoso, con los intentos de Dani de adelantarlo. La cuestión es que Dani se mantuvo a rueda y descaradamente enganchado a la moto de Rossi, estudiándolo, aprendiendo, doctorándose en las formas del hasta ahora único doctor de las dos ruedas. Cuando Dani creyó que por aquel día ya eran suficientes las lecciones decidió adelantar al maestro por la izquierda, por la derecha y casi por el medio, recibiendo la última lección del día y que no es otra que las dosis de mala educación con las que Rossi se defendió de los posibles adelantamientos y adelantamientos con los que Dani le amenazó y dedicó. Esa es una de las técnicas que mejor maneja Rossi, la intimidación, la intimidación disfrazada de mala educación enmascarada con cerradas arriesgadas que sólo implican la visita del duro asfalto si la víctima del gesto maleducado no ceja en el empeño de pasar por donde no se cabe. Eso es algo muy italiano, algo que Rossi maneja perfectamente como siempre lo ha demostrado, aunque algunos dirán que eso también forma parte de su saber y de su maestría. Al final Dani optó por ser tercero. Sea como sea la cuestión es que el primer duelo directo nos brindó imágenes formidables pero Dani tendrá que aprender a imitar esa mala educación para decirle a Rossi y al que convenga que todos sabemos ser malhablados o por lo contrario tendrá que superar esas malas formas con inteligencia que seguro de le brindarán soluciones alternativas para poder adelantar a Rossi y al que convenga. Intentándolo sólo no será suficiente porque para ser el primero un día u otro tendrá que adelantarlo como lo hace con el resto. Lo aprendió primero con Melandri, lo sigue aprendiendo con Hayden y deberá hacerlo con Rossi, que por ahora sigue siendo el mejor.
Gracias por el espectáculo Dani.
Nota: la foto la he tomado prestada de la página Web de Terra.